Radio Clásica

El Club de lectura leo luego existo

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Un sabado de aventuras en el Cusco. Foto de ¡Eps!
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viernes, 16 de enero de 2009

Mañana en la batalla piensa en mí



Es sin duda una obra llena de matices, situaciones curiosas. El título hace referencia a una batalla, pero las palabras son las que pronuncia un personaje de Shakespeare, en su obra Ricardo III, como bien lo anota Marías al final del libro, es por eso una novela de dilemas humanos, de vidas que se encuentran por casualidad y que a partir de un momento seguirán unidas para casi siempre.

El protagonista es Víctor Francés, un hombre divorciado, gionista de cine y negro literario que se introduce en la vida de una joven mujer que ha muerto en su presencia, en un incidente por demás extraño y tumultuoso, mientras ambos comenzaban a conversar y a hacer otras cositas en la casa de la bella joven. Ella es Marta Téllez, a quien su esposo, Dean, la esperaba pero en Londres, mientras él, entre tanto estaba ocupado en otro problema, tal vez igual de grave.

La consciencia, la culpa y el amor se mezclan en esta obra donde el monólogo del protagonista con su consciencia, la culpa y las dudas lo acompañan durante gran parte de la historia. Es una bella novela de dudas, la duda de saber sí hubiera sido bueno llamar a alguien para que avise a los médicos de lo ocurrido, la duda de saber si Marta, desde dónde estuviera, podría al fin descansar tranquila. "Es una bella novela, que gusta bastante".

domingo, 4 de enero de 2009

"Unas notas a modo de poema"

Después de mucho estoy muy cerca a un estante de fotos y de papeles, muy junto a un elefante de papel que se desliza por la selva imaginaria de mandrágoras gigantes que no existen por que son pequeñas en los libros que vemos cuando buscamos historias increíbles, y que además son dibujadas a la manera de un humano que no es sino parte de un buzón de celosías del recuerdo que permanece dentro del mar profundo.
Hay unas cajas de madera a un lado de donde se teje la palabra y el silencio, al otro mi hermano ve la televisión. Es como un juego esto del viento, de las rosas y del estante en la casa antigua y en la nueva la ornamenta de los días. Es verdad que no se escucha nada en la habitación, cuando uno duerme y apaciblemente se despierta sin hacerlo. Hay un enjambre de voces que te hablan y te escuchan, un enjambre de silencios.
Los sonidos de la furia y la tranquilidad, la consciencia, la otra consciencia y por ello doble consciencia de cuatro sueños más que se tienen sobre uno mismo, desde el otro mundo, desde donde se nos sueña y se inventa parte del mar contento de la tarde, ya que ocho sueños mas observan todo otro día, esos sonidos nos escuchan. Un mar, en un mar nos movemos y en el espacio de una gota es que cae todo, a pesar de que creemos que es al revés y que la gota cae frente nuestro, aunque tal vez no