Radio Clásica

El Club de lectura leo luego existo

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Un sabado de aventuras en el Cusco. Foto de ¡Eps!
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viernes, 19 de diciembre de 2008

Algunas notas

El eterno marido, la amante, los enamorados. Una voz en casa a la hora en que sale la señora que vive con alguien y no nos escucha. Un hombre invisible y otro gigante y que por eso mismo no vemos. Los gigantes son curiosos, los hombres altos, como el aire que no vemos.

El espejismo del desierto, la noche en que ella se despierta y te respira en el rostro, cuando ambos escapan de los soldados que los persiguen, en el momento en que están apretujados en una tienda y duermen, no solo eso, sino que cada uno en el cuerpo del otro, sin saber si al día siguiente se podrán ver los rostros.

La montaña, otra vez, el deseo, la película...otra vez, por qué Abril sera el mes y en Mayo el rostro se vestirá para invierno en Junio, con las medias de Julio y la voz de Agosto, hasta luego Agosto y otra vez la sensación de Diciembres en Navidad.Pero que entenderán de esto los amantes, los poetas y los científicos, unos dirán que en medio de todo vive el mes de lo amores, otros que en medio de la palabra hay sentimientos de odio y cariño, para otros la lógica apriori les indicara que es mejor el calor al frío, pero todos seguramente coincidirán en que es relativo el tiempo, sobre todo cuando se ama, se escribe y se crea.

Es la voz que se escucha en la noche, cuando todo comienza y todo termina, pero es la luz la que nos permite crear casi todo, inventarlo o pensar que lo inventamos, sin duda es en ella en la que se puede hacer algo nuevo, ya que la noche es en sí misma una forma de claridad, de otra clase, mientras que en el alba alguien muerto puede revivir y hacer que el mito se conjugue con la realidad, con las palabras y el retoño de Otoño en Primavera, cuando la voz de Julissa se acerca y se aleja, mientras Pedro la espera y en la montaña los gigantes se sinceran y se dejan ver, gigantes invisibles que le hablan a la gente, observandonos en la noche, como quien ve un sueño y añora un amor, una amistad y la casa muy junto a la selva y una taza de chocolate y sonrisas, casí por siempre...

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