La novela "El mundo de Larry" de Carol Shields, es una conmovedora historia de una ser que está enfrascado en un mundo lleno de amores y contratiempos. Los laberintos que hacia Larry, con las plantas, eran similares a los de Borges, o los de Umberto Eco en El nombre de la rosa. Estaba por escribir algo sobre este tema y de repente recorde una película Italiana, era como un paseo. Uno de los protagonistas era Gérard Depardieu, la película giraba en torno a un grupo de jóvenes que estaban concentrados en hacer una cinta distinta. El director era un rebelde y también los jóvenes. Ellos, a la vez, construían su propio laberinto, uno que los guiaba a Roma y luego a su mismo hogar. Querían encontrar un actor para su film y al final, en medio de arduas pruebas, escogieron a un actor famoso, en todo caso otra persona que no fue a las pruebas salió seleccionada, una actris les dijo que les iba a llevar a Gérard. Ellos no sabían si era el actor famoso u otro. Al pasar unos días, llegaba Gérard, en un avión, a la ciudad donde se filmaria la película, todo el pueblo no creía que esto fuera posible, pero lo fue. En la fiesta, en la que él se tenía que encontrar con su supuesto amor, motivo del film, una mujer que espera a su amado después de muchos años, y que al encontrarse con él recuperar el tiempo perdido su amor y sus ilusiones, Gerard se siente feliz y asombrado. Al final llega, además de a la fiesta, a un momento de confort, se divierte un poco, mucho. Después ya cansado y con las fuerzas consumidas por las noches de buena comida y bebida, le llevan a dormir a un cuarto de una casa contigua a la que se hace la fiesta. Prende el televisor y es en ese momento en el que muere. Todo el pueblo lo recuerda, justo en el momento en el que desempeñaba su ultimo papel en la pantalla, fue una película distinta y divertida y también nostálgica.
El Club de lectura leo luego existo
miércoles, 9 de diciembre de 2009
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